De Graaf comienza con el argumento de que pensar a lo grande cuando se trata de "la causa verde", es necesario. Uno tiene que pensar en un contexto global, como Buckminster Fuller hizo con su nave espacial Tierra y la ciudad Ecumenópolis mundial de Doxiades (1967). Al mostrar diferentes dibujos del crecimiento urbano, de Graaf demostra que la Ecumenoplis es, de hecho, una realidad no muy lejana. Estos acontecimientos se desarrollan, no en las viejas áreas metropolitanas occidentales, ion en las megaciudades del Sur y (Extremo) Oriente.
Para entender este crecimiento, De Graaf mira el aumento de la liberalización económica mundial. En general se supone que esto comenzó en Occidente con la elección simultánea de Margaret Thatcher en el Reino Unido y Ronald Reagan en los EE.UU.. De Graaf argumenta que se inició en China, con la llegada al poder de Deng Xiaoping y la introducción de la "Política de Puertas Abiertas". De Graaf sostuvo en su conferencia que el desarrollo económico está íntimamente ligado a la urbanización, cuestionando si la urbanización es una consecuencia del desarrollo económico o un medio para el desarrollo económico.
Los problemas que acompañan al crecimiento urbano acelerado estaban controlados según los pensadores (en occidente) que escriben acerca de la urbanización, pero cuando Asia se convirtió en el escenario principal de la urbanización, estos pensadores occidentales dejaron de pensar y escribir sobre el tema. Las visiones de la ciudad del mañana, hoy están controlados por las consultorías de grandes empresas. Los "Planes Directores" están creados por gigantes de la tecnología como Siemens y empresas de productos del hogar como IKEA.
De Graaf terminó su conferencia con el argumento de que el protagonismo de las ciudades es perjudicial para el estado de una nación; ciudades del "tercer mundo", como Sao Paulo y Ciudad de México tiene un PIB comparable al de los países del "primer mundo", como Suecia y Australia. Pero estas ciudades aún tienen menos poder político que sus respectivas naciones. Mientras que la ciudad (polis) era el lugar de nacimiento de la política, la Megalópolis llama a Megalopolitics...