László se instala en Pensilvania, donde encuentra apoyo gracias a su primo, Attila (Alessandro Nivola) allí conoce al acaudalado y prominente industrial Harrison Lee Van Buren (Guy Pearce) que reconoce su brillantez ofreciéndole un contrato que cambiará el rumbo de su vida en los siguientes 30 años. László recibe el encargo del proyecto del Instituto, un centro comunitario monumental que se convierte a la vez en su triunfo artístico y en un inquietante reflejo de su pasado, en los que su talento y su capacidad de resiliencia se ven enfrentados a su reconocimiento como emigrante, la adicción y los prejuicios.
El guion nos introduce en un rico paisaje de la América de posguerra haciendo referencia a las imponentes arquitecturas del brutalismo que se pueden encontrar por todo el planeta, una historia desnuda, simultáneamente maximalista y minimalista, y a la vez poética en su nivel formal, narrativo y temático. Aunque en realidad, la película trata más de ambición, deseos, superación, identidad, y supervivencia, que de arquitectura.
Adrien Brody como László Tóth y Felicity Jones como Erzsébet Tóth. The brutalist de Brady Corbet. Dirección de fotografía por Lol Crawley. Imagen cortesía de A24.
«The Brutalist» no sólo es el mejor trabajo hasta la fecha de Corbet, es también para muchos una de las mejores películas de 2024. Recién estrenada en Estados Unidos la película llegará a nuestras salas el 24 de enero del próximo 2025, pocas antes de la próxima edición de los Oscar, para la que muchos consideran que tiene muchas opciones.
La película, dirigida por Brady Corbet, recibió el León de plata de la LXXXI edición del Festival y siete nominaciones: mejor película, mejor director, mejor guion (Brady Corbet, Mona Fastvold), mejor interpretación de un actor masculino en una película de teatro (Adrien Brody), mejor interpretación de un actor femenino en un papel secundario (Felicity Jones), mejor interpretación de un actor masculino en un papel secundario (Guy Pearce), mejor partitura original (Daniel Blumberg).