Comienzas a indagar un poco más sobre su autor y descubres que sus imágenes dicen mucho más de él de lo que creías en un principio: que su autor también se reveló un día, o se cansó y decidió dimitir de la rutina, arriesgar o simplemente disfrutar dejando sus preocupaciones y buscar la felicidad en otro lugar, y se marchó a Londres. Hoy escuchaba algo por la radio que ya he contado varias veces, aquí la gente está muy triste, es bueno salir, porque aunque el resto de países no estén sustancialmente mejores, o no se perciba, lo llevan de otra manera y es cierto tuve la misma sensación cuando regresé este otoño de Grenoble; a la gente la tienen triste, no puede ser.
A mí me pasó que me mantuvieron en el fondo de una cueva oscura. Mi mente estaba aplastada bajo una montaña de deberes y preocupaciones. No había lugar para ninguna buena idea. Estaba perdido en la oscuridad. Pero un día me salí de ese laberinto y caminé por las escaleras a la azotea. Ese punto de vista fue absolutamente diferente. Ese nuevo punto de vista cambió todo. Hubo un nuevo mapa de allí.
Gregori Saavedra
Bueno, pues así he descubierto a uno de nuestros ilustradores preferidos, Gregori Saavedra, quien se marchó a Londres hace cuatro años y se convirtió o simplemente pudo consolidar, lo que es hoy, uno de los mejores ilustradores y directores creativos, (mira su bio al final de este artículo). Mirando descubrimos que uno de sus primeros pasos quedó congelado en el vídeo "Enjoy your worries", inquietudes inconformistas que todavía se pueden ver en sus trabajos como principal activo de sus ilustraciones.