El cartel del AFFR 2013 muestra la imagen de una actriz en un traje escénico, observando un fondo de grúas y rascacielos. Un fotograma surrealista, extraído de la película Estate. En este filme un grupo de residentes son seguidos en el contexto de un proyecto de participación. Los habitantes actúan en una obra sobre su barrio en Londres, que está en transformación, en un tiempo en que tenemos perfecta conciencia del pasado y el futuro. Hay mucho espacio vacante en las ciudades y tanto el valor como el significado de los edificios está en disputa. Películas como Unfinished Italy, Reconversão y Unfinished Spaces se centran en el ciclo vital de un edificio, retratando tanto las nuevas construcciones como espacios transformados o infrautilizados.
Pero la máquina del tiempo también nos lleva hacia atrás. La película Drop City, por ejemplo, nos transporta a los años setenta, cuando los hippies intentaron crear su propia sociedad idealista. Drop City fue un asentamiento experimental lleno de edificios abovedados, inspirados por Buckminster Fuller. Fue abandonada en 1973 y desde entonces es una ciudad fantasma. En total, el AFFR proyectará unas 100 películas, entre estrenos, clásicos de culto, animaciones y documentales. Todas tienen algo en común: la arquitectura y la ciudad.
Texto.- AFFR.