Genaro Alas nació en Madrid el 29 de abril de 1926 y estudió Arquitectura en la ETSAM, donde conoció al que sería su compañero de estudios y de trabajo, Pedro Casariego. Al finalizar la carrera se trasladó a Cáceres, donde comenzó a trabajar como arquitecto del Instituto Nacional de Colonización. Desde el principio, Genaro Alas muestra un especial interés por la construcción artesanal, que se verá reflejado en su arquitectura caracterizada por un lenguaje formal moderno. Posteriormente, fundará el estudio Alas y Casariego, y formará parte de un comité de investigación sobre construcciones prefabricadas con el que tendrá la oportunidad de viajar por Europa.
Uno de sus primeros trabajos, junto a Casariego, fue la construcción de la fábrica de Café Monky (1962-1964), para la empresa Cogesol S.A. Un edificio espectacular que servía tanto para mostrar el proceso de tratamiento del café como para potenciar la imagen de marca. Un proyecto que se inspira y toma referencias magistralmente de la Fábrica Fagus de Walter Gropious. El proyecto centra su atención en la torre de fabricación y en la escalera que la acompaña, un juego de transparencias que contrasta con los elementos cerrados con muros de ladrillo a cara vista. Un acertado juego de volúmenes que acentúan la diafanidad y espectacularidad del conjunto.
Gran parte de la obra de Genaro Alas se realizó en Madrid, como el edificio Generali (1958-1962), el edificio Centro (1965-1967), los edificios Trieste I y II (1969-1972 y 1971-1974, respectivamente), o la torre Windsor (1974-1979). Con la sede social de Assicurazioni Generali se realiza un interesante estudio de módulos basados en la unidad mínima de trabajo, cuya yuxtaposición permitía generar una planta flexible. El proyecto final de once plantas encaja en la parcela de un edificio con dos cuerpos de doble crujía que elude las composiciones simétricas, articulados por el núcleo de comunicación y desarrollando una serie de patios alicatados. La fachada presentará un interesante y limpio juego geométrico realizado con unas bandas horizontales de piedra caliza, apoyadas en perfiles metálicos que se alternan con bandas continuas de ventanas.
Con el edificio Centro se realizará una propuesta de estructura y fachada mixta en hormigón que se podría enmarcar dentro de la arquitectura brutalista madrileña, situado en la calle Orense y con un volumen retranqueado ya definido, se seguirá experimentando con los sistemas de modulación estructural y funcional. El edificio de diez alturas queda marcado en planta por un núcleo central con un patio octogonal en torno al que se desarrollarán las escaleras.
Otros ejemplos destacables fueron los encargos de Assicurazioni Generali, para los edificios de oficinas del proyecto Trieste (I y II), situados en la manzana de AZCA. Los edificios se proyectan desarrollando nuevamente un intenso estudio de módulos, en una retícula de siete metros de lado, con una estructura de hormigón armado, cuyo diseño de pórticos permite ajustar a diferentes alturas los forjados de planta según el programa. El edificio, en muchos aspectos, puede considerarse como antesala de la que será la torre Windsor.
La torre Windsor es, quizás, su edificio más conocido popularmente por las historias surgidas a raíz de su incendio en 2005. Sin embargo, merece especial significación por su interesante desarrollo estructural. El conjunto estaba integrado por tres partes con una torre dividida en dos volúmenes superpuestos, cuyas alturas iban desde los diez a los cien metros con diferentes usos: comerciales, espectáculos y oficinas. La torre, con una altura de noventa y ocho metros y veintiocho plantas, fue la parte desarrollada por el estudio de Alas y Casariego. La continuidad del volumen en altura se rompía por una planta térmica intermedia formada por grandes vigas perimetrales de 3,40 metros de canto, que soportaban las cargas de fachada, y forjados ayudados por el núcleo central. El volumen resultante era de una depurada abstracción y continuidad formal.
Además del trabajo en el estudio Alas y Casariego, (recogido en gran medida en una interesante publicación del MOPTMA1) Genaro Alas compaginó su actividad impartiendo clases de construcción en la ETSAM, donde se doctoró en 1966, y en la Universidad de Santa María de la Rábida, a principios de la década de los 90.
Genaro Alas generó una arquitectura de líneas limpias y con un gran interés por su depurada abstracción formal. Un trabajo desarrollado en gran parte con su compañero Pedro Casariego con quien formó un tándem que caracterizó parte de la arquitectura moderna madrileña. Juntos trabajaron en más de 300 proyectos hasta el fallecimiento en 2002 de Pedro Casariego. Alas mantuvo la actividad del estudio con Juan Casariego, hijo de su compañero, hasta 2007.
Uno de sus primeros trabajos, junto a Casariego, fue la construcción de la fábrica de Café Monky (1962-1964), para la empresa Cogesol S.A. Un edificio espectacular que servía tanto para mostrar el proceso de tratamiento del café como para potenciar la imagen de marca. Un proyecto que se inspira y toma referencias magistralmente de la Fábrica Fagus de Walter Gropious. El proyecto centra su atención en la torre de fabricación y en la escalera que la acompaña, un juego de transparencias que contrasta con los elementos cerrados con muros de ladrillo a cara vista. Un acertado juego de volúmenes que acentúan la diafanidad y espectacularidad del conjunto.
Gran parte de la obra de Genaro Alas se realizó en Madrid, como el edificio Generali (1958-1962), el edificio Centro (1965-1967), los edificios Trieste I y II (1969-1972 y 1971-1974, respectivamente), o la torre Windsor (1974-1979). Con la sede social de Assicurazioni Generali se realiza un interesante estudio de módulos basados en la unidad mínima de trabajo, cuya yuxtaposición permitía generar una planta flexible. El proyecto final de once plantas encaja en la parcela de un edificio con dos cuerpos de doble crujía que elude las composiciones simétricas, articulados por el núcleo de comunicación y desarrollando una serie de patios alicatados. La fachada presentará un interesante y limpio juego geométrico realizado con unas bandas horizontales de piedra caliza, apoyadas en perfiles metálicos que se alternan con bandas continuas de ventanas.
Con el edificio Centro se realizará una propuesta de estructura y fachada mixta en hormigón que se podría enmarcar dentro de la arquitectura brutalista madrileña, situado en la calle Orense y con un volumen retranqueado ya definido, se seguirá experimentando con los sistemas de modulación estructural y funcional. El edificio de diez alturas queda marcado en planta por un núcleo central con un patio octogonal en torno al que se desarrollarán las escaleras.
Otros ejemplos destacables fueron los encargos de Assicurazioni Generali, para los edificios de oficinas del proyecto Trieste (I y II), situados en la manzana de AZCA. Los edificios se proyectan desarrollando nuevamente un intenso estudio de módulos, en una retícula de siete metros de lado, con una estructura de hormigón armado, cuyo diseño de pórticos permite ajustar a diferentes alturas los forjados de planta según el programa. El edificio, en muchos aspectos, puede considerarse como antesala de la que será la torre Windsor.
La torre Windsor es, quizás, su edificio más conocido popularmente por las historias surgidas a raíz de su incendio en 2005. Sin embargo, merece especial significación por su interesante desarrollo estructural. El conjunto estaba integrado por tres partes con una torre dividida en dos volúmenes superpuestos, cuyas alturas iban desde los diez a los cien metros con diferentes usos: comerciales, espectáculos y oficinas. La torre, con una altura de noventa y ocho metros y veintiocho plantas, fue la parte desarrollada por el estudio de Alas y Casariego. La continuidad del volumen en altura se rompía por una planta térmica intermedia formada por grandes vigas perimetrales de 3,40 metros de canto, que soportaban las cargas de fachada, y forjados ayudados por el núcleo central. El volumen resultante era de una depurada abstracción y continuidad formal.
Además del trabajo en el estudio Alas y Casariego, (recogido en gran medida en una interesante publicación del MOPTMA1) Genaro Alas compaginó su actividad impartiendo clases de construcción en la ETSAM, donde se doctoró en 1966, y en la Universidad de Santa María de la Rábida, a principios de la década de los 90.
Genaro Alas generó una arquitectura de líneas limpias y con un gran interés por su depurada abstracción formal. Un trabajo desarrollado en gran parte con su compañero Pedro Casariego con quien formó un tándem que caracterizó parte de la arquitectura moderna madrileña. Juntos trabajaron en más de 300 proyectos hasta el fallecimiento en 2002 de Pedro Casariego. Alas mantuvo la actividad del estudio con Juan Casariego, hijo de su compañero, hasta 2007.
1. Alas Casariego Arquitectos, 1955-1955. Serie monografías. Madrid: Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente, Dirección General para la Vivienda, el Urbanismo y la Arquitectura, 1995.