El espectáculo, realizado en tres pases y orquestado por la agencia de eventos Ciudadano Kien, incluyó también una acción de teatro aéreo a cargo de la compañía Fura dels Baus y finalizó con un espectáculo pirotécnico producido por Pirotecnia Vulcano.
La voz de Juan Echanove acompañó el videomapping y dotó de vida al museo, el cual nos explica en primera persona los sucesos que transformaron la institución desde que fue inaugurada en 1819 hasta cómo es ahora.
Por otra parte, el videomapping se encargó de transformar la inerte fachada del edificio en algo orgánico y tradujo todo ello en un inmersivo viaje visual de luces, sombras e ilusiones ópticas que recorrieron la historia del museo y el conjunto de las colecciones y obras de arte que envuelve.