Consiguiendo 98 puntos para la arquitectura, el MIT también superó sus puntuaciones en años anteriores de 97,3 puntos en 2016 y los 96,5 puntos en 2015.
La primera escuela española, la ETSA de Barcelona de la Universitat Politècnica de Catalunya, ocupa la posición 26, lo que supone una ligera recuperación con respecto al año pasado que ocupó el 29 y no tanto con respecto a 2015 que estaba en el 22.
La segunda escuela española a bastante distancia es la ETSA de Madrid ocupa la posición 71, lo que supone un ligero retroceso con respecto al año pasado que ocupó el 70 y lo mismo con respecto a 2015 que estaba en el 71.
En España y tras las dos anteriores no figura ninguna otra escuela.
¿Quiere decir esto que estas son las mejores escuelas? Una pregunta difícil de responder.
El ranking valora la antigüedad de los investigadores de postgrado, lo que perjudica notablemente a las escuelas jóvenes. Es decir, el MIT habla de que allí se formaron arquitectos como Alvar Aalto, Buckminster Fuller, Louis Khan y Kenzo Tange. ¿pero se formaron allí los actuales mejores arquitectos? obviamente en la mayoría de los casos no. El MIT es una excepcional escuela de arquitectura, sin embargo cuando un joven arquitecto quiere conocer dónde se puede formar mejor, los parámetros son mucho más complejos y en algunos casos diametralmente opuestos, al menos en las primeras etapas, a los de un mero ranking.
Algo que es más evidente cuando se mira la posición de la ETSAM y uno recuerda aquellas palabras de Kenep Frampton señalando en la década de 1980 que era la mejor, yo lo creo, lo fue, sin embargo la aparición de hasta 11 escuelas en su entorno ha cambiado radicalmente el panorama y en pocos años ha ido replegando posiciones, mientras otras mejoran, aunque los rectores de estas nuevas deberían tomar nota, pues a este paso no aparecerán en décadas en dicho ranking.
Las instituciones se clasifican por su reputación entre los académicos y personal docente, el número de estudiantes y personal internacional, la proporción de profesores y estudiantes, sus instalaciones y el número de citas que hacen referencia a trabajo en documentos publicados en el último año.
Este ranking 2017 marca la séptima edición del QS University Rankings, que duplicó su lista este año para incluir las mejores 200 universidades para estudiar arquitectura.
