Un invernadero abandonado repensado como un nuevo espacio de eventos por HASA Architects

Descripción del proyecto por HASA Architects

HASA Architects ha completado las obras para transformar un invernadero hortícola abandonado en Highgate Bowl en el norte de Londres, en un nuevo espacio para eventos. El proyecto, inspirado en la estructura y la construcción del edificio original, explora las posibilidades de esta pieza olvidada de la ciudad devolviéndola su uso a través de una serie de intervenciones a pequeña escala. Estas intervenciones sensibles toman la forma de nuevos caminos externos e internos, así como las habitaciones y el mobiliario que guían a los visitantes a través de las grandes bahías abiertas del invernadero mientras que enmarcan vistas del paisaje circundante.

El estudio visitó el sitio en enero de 2017 y se puso a diseñar una propuesta que daría lugar a la restauración del invernadero abandonado, creando un espacio de eventos versátil que podría ser utilizado para una serie de actividades, incluyendo exposiciones y actuaciones. Ellos presentaron su visión para el invernadero al cliente en febrero de 2017 convenciéndolos del potencial del sitio, de manera que el trabajo comenzó poco después.

El diseño de la piel de madera contrachapada crea un paisaje plegado que se inspira en la estructura original y el sistema constructivo. Los nuevos caminos, habitaciones y piezas de mobiliario están diseñados en una configuración modular para negociar el cambio en los niveles entre cada bahía y proporcionar la separación entre los visitantes y la frágil piel exterior de cristal.

El contrachapado de abedul, acabado en un aceite de Osmo blanco, se utiliza para formar la nueva plataforma y componentes de carpintería. Las puertas correderas originales se sustituyen por nuevas puertas de madera contrachapada con manijas de gran tamaño que imitan las aletas estructurales que forman los lados de la plataforma. El uso de un material a lo largo del proyecto crea continuidad y refuerza la conexión entre cada bahía, mientras que el tono ligero de la madera contrachapada ofrece un contraste sutil con el invernadero y el paisaje. Para proporcionar contraste, la aplicación de un acabado oscuro se aplica a la estructura existente, creando una distinción entre antiguo y nuevo.

Para garantizar la finalización de la inauguración del Chelsea Flower Show en mayo, el diseño de detalle se desarrolló utilizando modelos físicos y maquetas 1: 1 de los elementos estructurales. Las obras se llevaron a cabo in situ en un período de 6 semanas, distribuidas en tres fases separadas: i) restauración del invernadero; ii) aplicación de una película protectora al vidrio; y iii) instalación de los elementos de carpintería.

Los componentes de la madera contrachapada se fabricaron fuera del sitio utilizando servicios de corte CNC (control numérico por ordenador) y se ensamblaron en un período de 10 días. El aceite blanco Osmo se aplicó a la madera una vez que los componentes estaban en la obra para asegurar la consistencia a lo largo de toda la estructura.