La decisión debía tomarse, como tantas otras veces en la vida, de manera casi extenuante: un chaval con ilusiones, sin un erasmus previo, pero muy ansiado, y con expectativas basadas en un viaje alucinante, rumbo determinado por impulsos.
La carrera de Arquitectura había finalizado, no así el aprendizaje y las ganas inmensas de contrastar, vivir , destilar,... los ricos y diferentes pensamientos que otras culturas pueden aportarle a todo ser vivo.
Dos opciones en la mano: o quedarse en España con unas buenas condiciones laborales, mejorables con el transcurso de los meses en un Estudio reseñable; o dar el salto y lanzarse a lo nuevo, con apenas una Beca y todo el apoyo y cariño de los que más te quieren porque, sin ellos, no digo que nada hubiese sido posible, pero la condición de bueno, inolvidable, es atribuída a los mismos con excelsa gratitud.
Evidentemente, elegí la segunda.
Así pues, dirigí mi camino a Dinamarca, donde me ofrecieron la oportunidad de empezar este camino...Cuánto no me arrepiento de lo elegido, que intenso cada momento. 3 meses que matizaron mi manera de pensar, de ratificar lo que tanto añoraba y que por fin se me ofrecía. No importaba lo duro que hubiese sido en algunos momentos, echar de menos, horas de más (que nunca se aprovechen de vosotros) y un enorme gusanillo en el estómago.
Posteriormente recalé en Holanda, donde siguió el idilio... Los caminos que me ofrecía mi ímpetu y los conocimientos que había adquirido durante los, para mí, agradables e inolvidables años de Universidad, eran infinitos y muy atractivos...
La situación se vio en ciertos aspectos colapsada. Tras finalizar en Holanda, por la falta de posibilidades de continuidad y, sobre todo, una situación personal, mi camino se fijó de nuevo en Madrid, durante un año...Pero, quien me lo diría, por igual electrizante e incluso, con uno de los aspectos más determinantes que nunca me habría sucedido de no haber regresado por un tiempo.
De nuevo, no pude estarme quieto. Mi sitio era otro... Y decidí moverme, seguro de mi elección.
El siguiente paso, en el que ahora estoy, fue Austria.
El enfoque de los artículos lo realizaré de manera transversal, uniendo sensaciones vitales y arquitectónicas a través de las tres ciudades en las que, de momento, he tenido la fortuna de habitar, tomando como nexo de unión un edificio, un espacio abierto, una sala de exposiciones...cualquier retal que me pueda servir de perfecta excusa para poder transmitiros las sensaciones que he atesorado, que conviven con mi presente y animan mi interés por conocer cada vez más, como persona y arquitecto, partes de este Mundo.
Y para empezar, lugar de tantos alegres comienzos, tristes despedidas y candorosas bienvenidas, os remito a la estación de tren, de la que cada ciudad tendió la mano para el transcurrir de mis sueños, que nunca dejaron de serlo, porque la realidad tiene la bonita parte de ellos, la de cumplirlos.
Si bien el primer paso fue el aeropuerto, considero el tren más bucólico, un transporte con más poso, donde mis sensaciones se quedaron más grabadas, tal vez por la lentitud de los raíles en su comparación con las alas; la de Copenhague, en pleno arranque del corazón de la ciudad, pegado al parque de atracciones más antiugo de Europa; la de Rotterdam y así mismo la de Delft (porque hablaré tanto de la ciudad cosmopolita como del pueblo en el que vivía y trabajaba), al igual que la mayoría de las estaciones de Holanda mientras allí disfrutaba de mi tiempo, en proceso de derribo y nueva construcción; y en extrema intervención, las de Austria: un agujero al lado del Belvedere, Südbahnhof, la cual conocí el año anterior por una fugaz entrevista en conexión con Graz y que ahora, se ha volatilizado, hasta que se concluyan sus obras; y Westbahnhof, la cual han querido preservar, yace ahora entre dos moles con cierto interés estructural, mientras las horas en su llamativo reloj incrustado en el aplacado de piedra discurren impasibles...
IN TREATMENT [>2] - METALOCUS.
DIRECTOR: JOSÉ JUAN BARBA. COORDINACIÓN: INÉS LALUETA. ORGANIZACIÓN: INÉS LALUETA, PEDRO NAVARRO. INVITADOS SEGUNDA TEMPORADA: JOSÉ JUAN BARBA, JAVIER SANCHO, FRANCISCO PELAEZ, MICHAEL MORADIELLOS, MELISSA SCHUMACHER, VERÓNICA ROSERO, AINHOA MARTÍN.