Memoria del proyecto.
Clement Blanchet que lidera el proyecto con OMA y Rem Koolhaas ha dicho: "El puente en sí mismo no es un evento en la ciudad, pero sí una plataforma que puede acomodarse a los eventos de la ciudad. Queremos proporcionar la expresión más simple -la mínima técnica, el mínimo esfuerzo, y casi la solución estructural más primitiva. Esta simplicidad nos permite crear una gran plataforma para los peatones y para el programa público, así como una gran flexibilidad para acomodarnos a las futuras necesidades de distintos tipos de tráfico."
Vicent Feltesse, presidente de Urban Community of Bordeaux tomó la decisión con la deliberación de un jurado de 40 personas, anunciando que el municipio quería algo "remarcado".
Más allá de fascinaciones tradicionales sobre el uso del estilo y la técnica, OMA intentó diseñar un puente del siglo XXI que explote las técnicas del estado del arte para crear un boulevard contemporáneo. Una plataforma de 44 metros de ancho y 545 metros de largo se prolonga más allá del agua y de cada lado, creando una conexión continua con la tierra. El puente asciende cuidadosamente, permitiendo un camino fácil mientras que proporciona el espacio libre suficiente para el paso de barcos. Cada tipo de tráfico -coches, RBD, bicicletas- tiene su propia línea, y está diseñada para alterarse según las necesidades de los vehículos. Pero el mayor camino está dedicado a los peatones.
El puente está diseñado para adherirse con el proyecto adyacente de redesarrollo urbano St. John Belcier. También intenta unificar las diferentes condiciones de las dos orilla del Garonne: de la orilla derecha, estrictamente alineada a la pradera, a la orilla izquierda de carácter urbano, anima a resolver el reto de la dualidad de un ambiente empapado de historia.
La decisión final entre el diseño de OMA y el diseño de Dietmar Feichtinger será tomada en Diciembre de este año, con la finalización del puente programada para 2018.
El proyecto se desarrolla en colaboración con ingenieros de WSP, el arquitecto paisajista Michel Desvigne, así como con la consultora EGIS y la agencia de iluminación Lumières Studio.
Texto.- por OMA