Así lo confirmaba el Director General de la Fundación Botín, Íñigo Sáenz de Miera, que afirmaba que “sobre la base del trabajo que hemos venido realizando en la Comunidad durante más de cincuenta años, nuestro objetivo es que el Centro Botín se convierta en uno de los centros de arte de referencia en Europa, un lugar acogedor en el que poder disfrutar, aprender e inspirarse, y un motor de desarrollo que genere riqueza económica, social y cultural para Cantabria y el norte de España”.
Obra del arquitecto y Premio Pritzker Renzo Piano en colaboración con Luis Vidal Arquitectos, el Centro Botín será un lugar único para el arte, la cultura y la actividad formativa, concebido para continuar y potenciar la labor desarrollada por la Fundación Botín en el ámbito de las artes plásticas desde 1984 y en el ámbito educativo desde 1972.
La Fundación Botín, que preside desde 2014 Javier Botín, comenzó hace seis años este proyecto concebido como un centro de arte privado de referencia en Europa, parte del circuito internacional de centros de arte de primer nivel, cuyo objetivo es generar desarrollo social aprovechando el potencial que tienen las artes para despertar la creatividad.
Con una superficie construida total de 10.285 m², el Centro Botín está ubicado en un enclave privilegiado de Santander y rescata para la ciudad el antiguo parking del Ferry. El edificio, situado en voladizo sobre el mar, está revestido por una piel de cerámica compuesta por 270.000 piezas circulares que reflejan la luz y los colores cambiantes del mar y del cielo. Articulado en dos volúmenes, el oeste dedicado al arte y el este a las actividades culturales y formativas, el edificio cuenta con dos amplias salas de exposiciones (2.500 m2 en su conjunto), un auditorio para 300 personas, aulas formativas, área de trabajo, una taberna marinera llamada “El Muelle”, dirigida por el chef dos estrellas Michelin Jesús Sánchez, una tienda y una azotea que ofrece una nueva mirada a la ciudad y a la bahía.
El nuevo centro de arte se encuentra en los históricos Jardines de Pereda que, como parte del proyecto, han sido completamente remodelados y ampliados por el reconocido paisajista Fernando Caruncho en colaboración con Renzo Piano. Los jardines han doblado su extensión y triplicado las zonas verdes hasta llegar al mar, en un proyecto arquitectónico y paisajístico en el que tan importante es el propio edificio como los espacios públicos creados a su alrededor, las plazas al norte y al oeste del edificio, siendo esta última un anfiteatro al aire libre para actividades culturales.
Actividades
Dirigido por Fátima Sánchez, el Centro Botín continuará y potenciará el programa de Artes Plásticas de la Fundación Botín, un programa que se desarrolla en torno a tres ejes: Formación a través de becas y talleres internacionales dirigidos por artistas de relevancia; investigación del dibujo de los grandes maestros españoles de todas las épocas; y divulgación por medio de exposiciones internacionales producidas por la propia Fundación fruto de sus programas de investigación (Eduardo Rosales, Bartolomé Esteban Murillo, José de Madrazo o José Gutiérrez Solana, entre otros) y formación (Joan Jonas, Julie Mehretu, Carlos Garaicoa y Tacita Dean son buen ejemplo de ello). Además, la colección de arte de la Fundación Botín es fiel reflejo de su programa de artes plásticas, que tiene una trayectoria de más de treinta años. Especializada en arte contemporáneo, cuenta con obras realizadas en una gran variedad de medios: pintura, escultura, dibujo, fotografía, video e instalación, etc. El Director Artístico del Centro es Benjamin Weil, que se incorporó al equipo de la Fundación en 2014.
La Comisión Asesora de Artes Plásticas de la Fundación Botín es la encargada de desarrollar el programa expositivo del Centro Botín, y lo hace bajo la dirección de su presidente y exdirector de la Tate Modern, Vicente Todolí. También forman parte de esta comisión Paloma Botín, Udo Kittelmann, Manuela Mena, María José Salazar y Benjamin Weil.