Las paredes están hechas de hormigón armado y el techo y su estructura son de madera. Según los arquitectos, el sistema constructivo elegido permite "tomar todas las decisiones proyectuales en conjunto y con coherencia".
Descripción del proyecto por Alarcia Ferrer Arquitectos
Una vivienda de gran tamaño que se acomoda con el objetivo de preservar los arboles existentes. En un amplio terreno de geometría irregular, de casi 2500 m², con un frente angosto hacia la calle, y un frondoso bosque autóctono, se implanta la casa en el fondo del mismo permitiendo abrir sus espacios hacia la buena orientación y el bosque.
El programa esta compuesto básicamente por 4 bloques. Hacia los extremos el bloque privado de dormitorios por un lado, y de estudio y quincho por el otro, ambos en 2 niveles. Hacia el centro, el bloque social con cocina-comedor-estar-galería, en altura doble, y el bloque de ingreso-estar intimo en altura simple. La articulación de las distintas áreas de la casa responden a la premisa de abrir sus ambientes hacia el norte y preservar los arboles existentes, todo unificado por una única cubierta inclinada.
La lógica del sistema constructivo, tanto vertical de los muros como horizontal de la cubierta, permite tomar todas las decisiones proyectuales en conjunto y coherencia. Los muros son de hormigón armado visto, llenados cada 1,20, y la estructura de cubierta y apoyos puntuales son de madera. La descomposición de las columnas junto con las diagonales, alivianan su espesor y dejan correr las carpinterías en su separación, además de su función estructural para cubrir mayores luces.
Además, el intercolumnio hace una pequeña reminiscencia al bosque, pero en este caso, desde la lógica de la construcción.