En esta ocasión el núm. 56 está dedicado a la reciente trayectoria del nuevo estudio Ábalos+Sentkiewicz, aunque uno se pregunta si un estudio con una trayectoria tan corta merece una monografía de esta calidad su contenido no defrauda. Resaltar la inestimable calidad de las propuestas contruidas como el estudio Albert Oehlen Bülher en Suiza, el edificio de oficinas Lolita en Madrid, las viviendas en la calle Orfila de Madrid o la Fundación Tapies en Barcelona.
Especialmente interesante, pues está en construcción, será ver terminada la Estación internodal, parque urbano y torres de viviendas en Logroño, de las que se presentan algunas imágenes iniciales de las obras.
La parte más discutible es la de algunos concursos, sigo sin entender la propuesta del Centro de Artes Escénicas para Taipei. La cacofónica multiplicación de la obra del extraordinario Oscar Niemeyer, es quizás el proyecto más débil por la gran diferencia entre unas plantas interesantes y unos volúmenes que parecen de otro proyecto.
La última parte son los textos y aquí Iñaki vuelve a recuperar el ritmo. Sus textos siempre me han parecido realmente sugerentes y brillantes. Fáciles de leer, eruditos por las rigurosas investigaciones que realiza y sorprendentes por la agilidad propositiva característica de un ensayo, como el de "La belleza termodinámica" aunque ecología y sostenibilidad es discutible que sean lo mismo. El resto son dos textos introductorios de Philip Ursprung y Florencio Manteca y se cierra en la sección Nexus con dos artículos: el ya mencionado de Iñaki Ábalos y un texto fruto de una conversación entre Ábalos, Sentkiewicz y Enrique Walker.
José Juan Barba.
Extracto de la ‘La belleza termodinámica’ por Iñaki Ábalos:
"La sostenibilidad se ha convertido en el nuevo cliché, como un canto a las buenas intenciones que trae a la memoria el título homónimo de Colin Rowe The architecture of good intentions -un alegato contra las actitudes morales en la arquitectura moderna-, en el sentido de abrir la sospecha sobre su naturaleza técnica, arquitectónica o meramente retórica, si no mercadotécnica. Este texto parte de una hipótesis simple: sólo si hay una verdadera discusión estética, si hay una idea de belleza asociada a la sostenibilidad, ésta podrá interesar a la arquitectura de una forma no circunstancial y tendrá sentido trabajar sobre ella. Y ello nos lleva a adoptar un primer axioma: no hablar en términos morales o éticos de sostenibilidad, sino circunscribirnos a los aspectos puramente técnicos y estéticos, al menos si queremos hablar en términos disciplinares.
Orígenes y evolución: los dos triángulos.
Si los orígenes de una idea son siempre importantes, conviene no olvidar que el campo de la sostenibilidad arquitectónica ha pasado en muy pocas décadas de ser una proclama política que arraigó originalmente en el contexto hippy y post-hippy, con manifestaciones individualistas y románticas -a menudo inspiradas por Richard Buckminster Fuller, cruzado con distintos pensadores-, a ser un logo liderado por las grandes ingenierías y algunos arquitectos que fomentaron originalmente la arquitectura high tech. Este desplazamiento ha coincidido, no por casualidad, con el cambio de actitud de las principales compañías eléctricas y petroleras, que desde el año 1973 se han desplazado paulatina, pero persistentemente, desde el rechazo frontal hasta el liderazgo en los sectores de la energía renovable y los productos constructivos con aplicación a la escala arquitectónica. El fenómeno ha venido acompañado de un interés creciente social, mediático y político por la sostenibilidad, que está transformando, por medio de nuevas regulaciones y la demanda popular y política, las prácticas de los arquitectos, las propias técnicas proyectuales. Hasta ahora, éstas estaban más o menos enfocadas en torno a lo tectónico, pero hoy están dirigidas a comprensiones 'bioclimáticas' del objeto proyectual, una concepción que demanda nuevos conocimientos, nuevos expertos y nuevas formas de abordar el proyecto."
Copyright del texto: sus autores.
Copyright de la edición: Editorial Gustavo Gili SL.